jueves, 28 de mayo de 2020

Helado de stracciatella


Muy buenas y calurosas tardes!!!!
Galicia a 27 grados en el mes de mayo, que calor!!!! Aunque parece que esto nos va durar poco y lo vamos a disfrutar, ya que parece ser que para la semana volvemos a la realidad del norte gallego, que es lluvia.
Mientras tanto nos vamos a marcar un delicioso helado de Stracciatella para hacerle compañía al de chocolate que hice el otro día. Que sepáis que huyo de las recetas de helado que llevan huevo, como del diablo y la receta de hoy va en esa línea sin huevo, y además es muy sencillita.
El resultado un es un helado muy suave y cremoso.

Ingredientes


250 ml de nata, mínimo 35% de materia grasa
150 ml de leche normal
90 gr de leche evaporada
100 gr de azúcar
3 cucharaditas de maicena
1 cucharadita de miel
1 cucharadita de vainilla
100 gr de chips de chocolate

Elaboración


Reservamos 100 ml de leche y diluimos la maicena sin dejar grumos.
En un cazo colocamos el resto de la leche, la nata, la leche evaporada y el azúcar y llevamos al fuego. Añadimos la leche reservada junto con la maicena y calentamos a fuego suave sin dejar de remover y llevamos a ebullición durante unos minutos.
Retiramos del fuego y añadimos la vainilla y la miel. Removemos hasta conseguir una mezcla homogénea.
Pasamos a un bol y tapamos la mezcla con un filma transparente haciendo contacto con ella, para evitar que haga costra. Dejamos atemperar a temperatura ambiente y luego llevamos a la nevera durante toda la noche.
A la mañana siguiente sacamos el recipiente de la heladera del congelador, la ponemos en marcha y añadimos la mezcla del helado. la dejaremos en la heladera alrededor de unos 30 minutos. 
Unos 10 minutos antes de que se termine de hacer el helado añadimos los chips de chocolate y dejamos que se integren en el helado.
Por último pasamos la mezcla del helado a un recipiente hermético y lo llevamos al congelador mínimo unas 5 horas para que el helado termine de coger consistencia.
Y listos para darnos un buen caprichito !!!!



martes, 26 de mayo de 2020

Helado de Chocolate sin huevo




Pues parece que en nuestra querida Galicia ha salido el sol y esto es para celebrarlo y por todo lo alto. Con lo cuál me he liado la  manta a la cabeza y he decidido hacer helados, pero..... después de rebuscar y ver muchas recetas con huevo y que no me convencían mucho he dado con esta maravillosa y deliciosa receta de helado de chocolate sin huevo y ha sido un auténtico acierto.
De echo esta receta viene para quedarse en mis básicos. He de decir que la receta está echa en heladera, en concreto en la heladera del Lidl que me había comprado el verano pasado y que apenas le había dado uso, ya que las recetas que había probado no me convencían, pero este verano que se vaya preparando......
Al lío.....!!!!

Ingredientes

250 gr de leche entera
240 gr de nata líquida para montar
250 gr de leche evaporada
140 gr de azúcar
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 pellizco de sal
3 cucharaditas de maicena
140 gr de chocolate fondant negro
1 cucharada de cacao en polvo

Elaboración


Lo primero que vamos a hacer es fundir el chocolate al baño maría. Le añadimos el cacao en polvo, removemos y reservamos.
Reservamos 100 ml de leche para diluir la maicena hasta que nos quede sin ningún grumo.
En un cazo ponemos el resto de la leche, la leche evaporada, la nata, el azúcar, la sal y le agregamos la mezcla de la leche y la maicena y llevamos el cazo a fuego.
Calentaremos la mezcla a fuego suave, sin dejar de remover hasta que hierva durante un par de minutos y le añadimos la mezcla del chocolate y mezclamos hasta conseguir una mezcla homogénea. si vemos que a la mezcla le queda algún grumo  le pasamos la batidora de mano.
Retiramos del fuego e incorporamos el extracto de vainilla.
Pasamos la mezcla a un bol limpio y la tapamos con un papel film tocando la superficie de la mezcla y dejamos enfriar. Yo la dejo fuera de la nevera hasta enfriar, luego la refrigero durante toda la noche en la nevera antes de meterla en la heladera.
Al día siguiente sacamos la mezcla de la nevera y la llevamos a la heladera durante unos 12-15 minutos, que es lo que tarda en estar listo nuestro helado.
Después pasamos a un recipiente hermético para llevarlo al congelador para que termine de ponerse firme.




Como podéis observar en la foto tenemos helado de chocolate y helado de stracciatella...... pero.... eso será en otra receta.
La receta es de El invitado de Invierno.




lunes, 25 de mayo de 2020

Pan de molde integral





Volvemos a la carga con un pan de molde, en este caso integral. Llevaba ya un tiempo queriendo hacer un pan integral, pero con el tema del confinamiento era casi imposible conseguir harina. 
Así que en cuando fui al supermercado y me encontré harina integral, me dije que de ésta no pasaba sin hacer yo un pan integral. Para iniciarme decidí hacer un pan de molde, receta sencilla pero muy resultona. El resultado es un pan integral esponjoso con un toque húmedo y un olorcillo de recién horneado que no os podéis ni imaginar.
Animaros!!!!

Ingredientes

250 gr de harina de fuerza
250 gr de harina integral
300 ml de leche tibia
30 gr de azúcar
30 gr de mantequilla a temperatura ambiente
3 gr de levadura seca de panadero
1 cucharada de sal

Elaboración

En el bol de la amasadora colocamos las harinas, el azúcar y la sal.
En una jarrita colocamos la leche tibia junto con la levadura.
Ponemos el robot amasador en marcha y empezamos a añadir la mezcla de la jarrita poco a poco para que se vaya incorporando correctamente.
Una vez veamos que la mezcla está integrada, incorporamos la mantequilla cortada en cubos y amasamos hasta que se haya integrado y nos quede una masa lisa.
Pasamos la masa a un bol que previamente habremos engrasado, tapamos con papel film transparente y dejamos reposar hasta que doble su volumen en un lugar alejado de corrientes.
Cuando haya pasado este tiempo desgasificar la masa, simplemente le damos un ligero amasado y la formamos para pasar a un molde, que  previamente habremos engrasado y colocado un papel de horno en la base. Cubrimos con un paño y volvemos a dejar levar la masa hasta que doble su volumen.
Pasado el tiempo de levado, precalentamos el horno a 180ºC y llevamos nuestro pan al horno por unos 30 minutos.
Una vez horneado lo dejamos unos minutos sobre una rejilla en el molde y luego desmoldamos, ya que si lo dejamos mucho tiempo el pan se humedecerá.
Dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.






lunes, 18 de mayo de 2020

Tarta de manzana jugosa




Toca receta nueva y hoy me salgo del modo panadero y entro en modo aprovechar unas manzanas. La verdad es que este día me he mosqueado lo mío porque me compré unas manzanas bien preciosas y a los dos días les han empezado a salir unas manchitas y en vista de que se iban a estropear he decidido hacer una tarta de manzana, pero he estado viendo recetas y he dado con una receta que me pedía a gritos que la hiciese, nada tiene que ver esta tarta de manzana con la clásica, aunque cabe decir que en casa de mis padres la clásica creo que pasó a la historia y se instala esta.
Cabe decir que en la próxima espolvorearé un poco de azúcar sobre la manzana para que me quede un poco mas marroncita, pero por lo demás es espectácular.
Al lío!!!!


Ingredientes


5 manzanas de tamaño medio
100 gr de azúcar
70 gr de maicena
3 yogures griegos naturales de 125 gr cada uno
4 huevos L
Mermelada de albaricoque


Elaboración


Forramos el molde con papel de horno.
Precalentamos el horno a 180º C, con calor arriba y abajo.
Limpiamos, secamos y descorazonamos las manzanas. Cortamos 3 de ellas en trozos, que serán las que irán en la mezcla, las otras 2 las reservaremos para decorar la parte de arriba de la tarta.
Yo utilicé una batidora de vaso, pero os vale perfectamente una batidora de brazo u un bol. Simplemente ponemos las tres manzanas troceadas, los yogures griegos, el azúcar, la maicena, los huevos y lo trituramos hasta licuarlo por completo. Si os gusta la canela le podéis añadir una cucharadita a la mezcla.
Vertemos la masa en el molde que previamente hemos forrado y colocamos las manzanas laminadas por la superficie. No os asustéis, veréis que la mezcla es muy líquida y os va a dar la sensación de que las láminas se os van a sumergir. Colocándolas con cuidado y si las láminas son finas esto no va a pasar.
Horneamos a 180ºC durante 50-55 minutos o hasta que al pinchar con un palillo en el centro del bizcocho éste salga limpio.
Sacamos del horno y colocamos el molde sobre una rejilla y dejamos que se entibie, luego desmoldamos.
Pincelamos la superficie con mermelada, si ésta está muy densa, la metemos unos segundos al microondas y nos resultará más fácil extenderla.




Lo conservaremos en la nevera.


Fuente receta: Como he puesto la cocina



domingo, 17 de mayo de 2020

Pan Brioche





Estoy de vuelta y con un delicioso pan brioche, como aún me niego a ir por el pan a diario lo he hecho para hacerme las tostadas del desayuno. Deciros que su miga es suave y para nada compacta, de hecho durante este confinamiento he descubierto mi lado panadero y me encanta, para esta ocasión decidí usar un molde de plun cake , hacer un trenzado y decorar con unas láminas de almendra.
La receta es muy sencilla, ya sabéis que no soy mucho de complicarme. Esta receta la podéis elaborar la noche antes dejarla con el primer levado toda la noche, al día siguiente desgasificar, dejar levar otra vez y hornear. La diferencia con el levado largo es que debéis reducir a la mitad la cantidad de levadura, pero conseguiréis un sabor espectacular!!!!
Bueno al lío!!!


Ingredientes


335 gr de harina de fuerza
3 gr de de levadura seca de panadería 
60 gr de leche tibia
3 huevos M + 1 huevo para pintar
5 gr de sal
25 gr de azúcar
120 gr de mantequilla cortada en cubos a temperatura ambiente
almendra en láminas para decorar

Elaboración


En en bol de la amadora colocamos los ingredientes secos: la harina, la sal, el azúcar y la levadura. Tened cuidado de que la levadura y la sal no se toquen.
En un cuenco batimos ligeramente los huevos para facilitar la integración y reservamos.
Ponemos en marcha el robot amasador a velocidad baja y añadimos la leche y los huevos y dejamos que se vayan integrando. Llegará un punto en que la masa estará como seca y es en ese punto cuando empezamos a añadir la mantequilla cortada en cubos, veremos que la mantequilla se va incorporando a la masa y la va volviendo cada vez más suave y elástica.
Una vez la mantequilla se haya incorporado por completo dejamos amasando unos 15 - 20 minutos, veremos que la masa se va volviendo cada vez más suave y elástica y se va despegando de las paredes del bol y se va enganchando a los ganchos de la amasadora, aparte si la tocamos ligeramente se pega.
Engrasamos un bol amplio y pasamos la masa a el, la tapamos y dejamos levar hasta que doble su volumen.
Pasado este tiempo, sacamos la masa del bol y sobre la encimera ligeramente enharinada damos un ligero amasado para desgasificar. En mi caso pesé la masa dividí en 3 partes iguales y trencé, pasamos la masa a un molde que previamente habremos engrasado y lo más importante, colocamos una tira de papel de horno en la base, para que luego nos sea más fácil desmoldar. Tapamos la masa y dejamos levar de nuevo hasta de doble su volumen.


Cuando haya levado, encendemos el horno a 180ºC, calor arriba y abajo. Pintamos con huevo batido y decoramos con láminas de almendra nuestro brioche, lo llevamos al horno 25-30 minutos.
Sacamos del horno y dejamos atemperar unos minutos y desmoldamos, es importante desmoldarlo pronto, ya que si lo dejamos mucho tiempo dentro del molde, el pan se nos humedecerá.



Mirad que miga más bonita!!!
Si tenéis cualquier duda, preguntad sin miedo.

viernes, 15 de mayo de 2020

Tarta de cumpleaños Cupcake








Muy buenas!!!!

Hoy voy a compartir con vosotros una pequeña locura que se me ha ocurrido estos días para celebrar un cumpleaños de balcón a balcón!!! Cosas de la desescalada.
Tarta de cumpleaños hecha con lo que hay por casa y echándole mucho morro y mucha imaginación.
La verdad esta pequeña locurilla ya llevaba yo una temporada dándole vueltas, la idea era hacérsela a mi sobrina por su cumple, pero no se pudo, por temas del confinamiento. El molde ya hace la porra de años que lo tengo así que esta vez me lié la manta a la cabeza e hice un bizcocho que luego medio vacié para poder rellenar con chuches y decoré el copete del cupcake con unas rosas de un suave buttercream de vainilla y la base del cupcake la bañé con chocolate.

Ingredientes para el bizcocho Red Velvet


125 gr de mantequilla a temperatura ambiente
275 gr de azúcar
3 huevos M
280 gr de harina de trigo
15 gr de cacao en polvo amargo
1 cucharadita de polvo de hornear
1 cucharadita de bicarbonato sódico
1/4 de de cucharadita de sal
240 gr de buttermilk
1 cucharada de colorante rojo en gel
1 cucharada de vinagre blanco
1 cucharada de extracto de vainilla

Elaboración


Precalentamos el horno 1 170ºC.
Engrasamos el molde con espray desmoldante.
Tamizamos y reservamos en un bol la harina, el cacao en polvo, el polvo de hornear, el bicarbonato y la sal.
En un jarrita mezclamos el buttermilk ,( Para hacer el buttermilk bastará con poner 240 gr de leche en una jarra añadir una cucharadita de zumo de limón y dejar reposar un rato. No os asustéis ya que tiene apariencia de que se corta la leche, es normal. ) el colorante rojo, el extracto de vainilla y el vinagre. Reservamos.
Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que haya blanqueado, y obtengamos una mezcla esponjosa.
Añadimos los huevos uno a uno, ligeramente batidos. Los vamos añadiendo a velocidad baja y no añadimos el siguiente hasta que el anterior se haya incorporado por completo a la mezcla.
Continuamos añadiendo los ingredientes secos que teníamos reservados en tres veces, y los líquidos en dos. Comenzamos y terminamos con los secos.
Levamos la masa al molde y horneamos.
Ojo!!! En mi caso me llevo 40 minutos, aunque esto va a depender del tipo del molde que utilicéis. El bizcocho estará listo cuando insertéis un palillo y éste salga totalmente limpio.
Sacamos del horno y dejamos reposar el molde sobre una rejilla durante unos 15 minutos y luego desmoldamos y dejamos enfriar por completo.
Cuando estén fríos del todo, yo los envuelvo en film transparente y los dejo reposar en el frigorífico de un día para el otro, ya que el sabor y la textura del bizcocho estará más asentado.

Crema básica de vainilla


250 gr de mantequilla a temperatura ambiente
325 gr de azúcar superfino
1 cucharadita de extracto de vainilla
2-3 cucharadas de leche semidesnatada
colorante en pasta a nuestro gusto

Tamizamos el azúcar superfino y lo colocamos en un cuenco junto con la mantequilla, el extracto de vainilla y la leche. Cubriendo el bol, batimos a velocidad baja un minuto.
Después subimos la velocidad y batimos al menos otros 5 minutos a velocidad media-alta. la crema de mantequilla se volverá casi blanca y su textura pasará a ser muy cremosa. 
Yo para teñirlo utilicé colorante en pasta.

Para bañar la base de la tarta en chocolate simplemente derretimos chocolate fondant de postres al baño maría y bañamos el bizcocho y dejamos secar.

Ahora os voy a dejar el montaje de la tarta.







Fuente Red Velvet: Bea Roque
Fuente Buttercream de Mantequilla: Alma Obregón


viernes, 8 de mayo de 2020

Pan Jalá





Vuelvo de  nuevo y vuelvo con un gran descubrimiento y un gran reto.
Desde que comenzamos con el confinamiento es casi imposible conseguir tanto levadura como harina de fuerza, pero el otro día navegando por la red descubrí este delicioso pan Jalá o Challah, que es un pan judío. Como os iba contando este pan tiene la peculiaridad de que lo podemos elaborar con harina de trigo normal, evidentemente también admite más variaciones, pero antes de ir a la receta os voy a contar un poco la historia de este pan.
El pan Jalá es un pan judío trenzado que se consume durante sus festividades, pero sobre toso durante el  Sabbath.
La mayoría de las recetas tradicionales usan huevos, harina, agua, levadura y sal, pero también existe "Jalá de agua" hecho sin huevos.
En las recetas se puede reemplazar la harina blanca, con harina de trigo integral, avena, espelta o azúcar con miel. Además surgieron variedades regionales: masas espolvoreadas con semillas de sésamo, perfumadas con anís o cilantro, y cubiertas con algunas almendras o aceite de oliva.
Dicho esto vamos al lío!!!

Ingredientes

500 gr de harina de trigo todo uso
60 gr de azúcar
10 gr de sal fina
3 gr de levadura seca de panadero
200 gr de agua tibia
1 huevo M
70 gr de aceite de oliva
  • 1 huevo + azúcar para decorar

Elaboración

En el bol del robot amasador colocamos la harina junto con la sal y el azúcar.
Disolvemos la levadura en el agua, que debe estar tibia, yo la pongo en una jarrita, así luego me es más fácil añadirla a la masa.
Batimos el huevo ligeramente y reservamos.
Ponemos el robot amasador en marcha a velocidad baja y comenzamos a añadir la mezcla de agua y levadura, continuamos con el huevo ligeramente batido y por último vamos añadiendo el aceite y vamos subiendo la velocidad del robot amasador. Batimos a velocidad alta hasta que se integren perfectamente los ingredientes, la masa se irá volviendo más suave y elástica con el paso de los minutos. Sabremos que nuestra masa está lisa porque a parte de estar lisa y suave como os digo, ésta empezará a despegarse de las paredes del bol y se quedará pegada a los ganchos amadores, yo suelo amasar durante unos 15-20 minutos.
Pasamos la masa a un bol amplio que previamente habremos engrasado y lo taparemos con film transparente y dejaremos levar la masa de cualquier de las 2 formas siguientes:
  • Refrigeramos durante toda la noche. Los levados lentos y en frío aportan un sabor más intenso a la masa final. A la mañana siguiente bastará con dejar que la masa se aclimate durante una media hora más o menos fuera del frigorífico.
  • Colocamos nuestro cuenco en un sitio cálido y alejado de las corrientes hasta que nuestra masa duplique su volumen.
Cuando tengamos nuestra masa levada, la sacamos del bol y sobre una superficie ligeramente enharinada le damos un suave amasado para desgasificar. Pesamos la masa y la dividimos en 4 partes iguales, las mías pesaban aproximadamente 225 gr. Estiramos cada parte formando una tira y las trenzamos pasándolas por encima de la que está justo al lado y por debajo de la siguiente y así hasta terminar. Una vez terminada la trenza los extremos los metemos hacia abajo para que nos quede el pan bonito.
Pasamos la trenza a la placa del horno a la que previamente habremos puesto un papel de horno, la tapamos y la dejamos levar hasta que doble su volumen.





Pasado este tiempo, precalentamos el horno a 180ºC, con calor arriba y abajo, pincelamos nuestra Jalá con huevo batido y espolvoreamos con azúcar.
Llevamos al horno durante 30 minutos o hasta que esté ligeramente dorado.
Retiramos del horno y pasamos a una rejilla para que enfríe por completo.










martes, 5 de mayo de 2020

Panecillos tiernos





Como cada pocos días toca hacer pan, ya que seguimos negándonos a bajar a diario a por el pan. En este caso en vez de optar por la opción de hacer un pan grande me he decantado por hacer panecillos individuales y simplemente los he adornado con una mezcla de semillas. 
Se trata de una receta sencilla, es un pan muy parecido al pan de leche y que nos va a dar para unos 8 panecillos, decir que yo me hice unas hamburguesas con ellos de muerte!!!

Ingredientes

325 gr de harina de fuerza
170 ml de leche entera
3 gr de levadura seca de panadería
1 huevo M
10 gr de azúcar
5 gr de sal
20 ml de aceite de oliva
Mezcla de semillas para decorar, aunque se puede omitir

Elaboración

En una jarrita colocamos la leche que debe estar tibia y la levadura.
En el bol del robot amasador colocamos la harina, el azúcar y la sal. Ponemos en marcha a velocidad baja y añadimos el huevo ligeramente batido , según se va integrando continuamos añadiendo la mezcla de la leche y la levadura. Llegados a este punto debemos subir la velocidad del robot para facilitar la incorporación de los ingredientes, batimos durante unos 10 minutos para que se incorporen bien los ingredientes.
Por último añadimos el aceite y subimos la velocidad del robot y amasamos hasta conseguir una masa suave y elástica. Sabremos que la masa está lista cuando una vez se a integrado por completo el aceite, seguimos batiendo y la masa empezará a despegarse del bol y se enganchará al brazo amasador. Yo soy de las que suele amasar durante unos 10 minutos o más.
Trasladamos la masa a un bol que previamente habremos engrasado, tapamos con un film transparente y dejamos reposar en un lugar cálido de nuestra cocina hasta que doble su volumen.
Pasado este tiempo de levado con la encimera ligeramente enharinada, damos un ligero amasado para desgasificar la masa. Dividimos la masa en 8 porciones de 70 gr y boleamos.
Sobre la encimera, sin harina, ahuecar la mano y colocar una porción de masa dentro y apretando ligeramente hazla rodar en un movimiento circular impulsando la masa con el borde de la mano. Se debe formar una bola compacta sin que se mueva del sitio hasta obtener una superficie lisa y con un recogido en la parte inferior.
Los vamos colocando sobre una placa de horno a la previamente le habremos puesto un papel de horno, los volvemos a tapar con un paño y los dejamos levar de nuevo.
Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo, sin ventilador.
Pintamos los panecillos con agua, lo vamos a hacer con cuidado para que no bajen y si queremos les espolvoreamos las semillas. Al pintarlos con agua nos quedarán unos panes pálidos, si queremos que cojan un colorcillo dorado simplemente los pintamos con leche. Los míos están pintados con agua.
Horneamos durante 15 minutos, los retiramos del horno y los dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.
Yo los conservé durante unos días en una lata que tengo, es una especie de panera.


Y como siempre os dejo la foto de la miga.





domingo, 3 de mayo de 2020

Pan De Leche Japonés Hokkaido





Pues sí, yo tampoco me he podido resistir a este pan y ya os digo que se va a convertir en otro básico de mi cocina. Vaya miga y vaya textura, en la foto se puede apreciar, pero la realidad aún es más brutal, es un auténtico espectáculo.
Os voy a explicar un poco la historia de este pan y el proceso que lo hace tan especial.
A finales del siglo XX nos econtramos con el pan Hokkaido, una masa de pan de molde extremadamente tierno conocido hoy en el mundo entero. La peculiaridad de este pan es su miga suave, elástica, muy blanda y esponjosa, húmeda sin ser muy grasa y que además se conserva tierna durante mucho tiempo.
El secreto de esta masa reside en una técnica llamada tang zhong y todas las fuentes señalan a que su origen es Japón.
El tang zhong es una técnica muy sencilla para lograr panes mucho más tiernos. También conocido como roux de agua, consiste en cocer parte de la harina y el líquido de una receta de pan hasta obtener una especie de roux o papilla.
Emplearemos esta técnica para enriquecer y mejorar masas de panadería, como pueden ser el pan de molde, bollos suizos o de mantequilla, pan de leche o incluso el roscones.




Y ahora si que no me enrollo más y vamos con la receta.

Ingredientes

  • Ingredientes para el tang zhong
50 gr de harina de fuerza
125 ml de agua
125 ml de leche entera
  • Ingredientes para la masa del pan Hokkaido
600 gr de harina de fuerza
100 gr de azúcar blanco
10 gr de sal
4´5 gr de levadura seca de panadero
2 huevos M ligeramente batidos + 1 extra para pincelar
50 gr de nata para montar 
50 gr de leche entera a temperatura ambiente
50 gr de mantequilla derretida


Elaboración

Comenzamos elaborando el tang zhong. Para ello en una cacerola, diluimos la harina en el agua y la leche procurando no dejar grumos. Calentamos la mezcla a fuego medio sin dejar de remover hasta que espese y forme surcos. El tang zhong no tiene que hervir y si disponemos de un termómetro no demos superar los 65º.
Retiramos del fuego y colocamos el tang zhong en el bol, tapamos la superficie con papel film transparente para evitar que forme una costra y dejamos enfriar.
Ahora vamos con la masa del pan. En el bol de la batidora colocamos la harina, el azúcar y la sal.
En una jarrita añadimos la levadura a la leche y reservamos.
Comenzamos a añadir los ingredientes líquidos a los secos, los vamos a integrar en el siguiente orden, la leche junto con la levadura, la nata, los huevos ligeramente batidos y por último el tang zhong. Todo esto lo integramos a velocidad baja, salvo que queráis que vuestra cocina se convierta en una nube de harina!!! Según se van incorporando los ingredientes vamos subiendo la velocidad del robot amador. Tardaremos unos 10 minutos.
Por último añadimos la mantequilla derretida y continuamos amasando, debemos subir un poco la velocidad y amasar durante unos 20 minutos o más, hasta que nos quede una masa suave y elástica. Llegados a este punto pasamos nuestra masa a un bol que previamente habremos engrasado, la tapamos con un film transparente y la dejamos reposar hasta que duplique su volumen.
Preparamos los moldes, yo utilicé dos de plum cake que tenía por casa, los engrasé y les coloqué papel de horno en el fondo para que a la hora de desmoldar me resultara más fácil.
Una ves haya levado enharinamos ligeramente la encimera, ( Yo antes pesé la masa y la dividí en 5 partes. En un molde coloqué 3 porciones de 250 gr aprox. y en el otro 2 porciones de 150 gr aprox. ).
Damos un ligero amasado para desgasificar la masa y estiramos las piezas en forma ovalada, volteamos los laterales hacia adentro, le damos la vuelta y estiramos hasta formar un rectángulo. Volvemos a darle la vuelta de forma que el cierre nos quede hacia adentro y comenzamos a enrollar la masa hasta formar un rollo. Hacemos lo mismo con el resto de las porciones y las colocamos en un molde ligeramente espaciadas entre ellas, ya que aún debemos volver a dejar levar.


Como podéis ver tengo que hacer más veces este pan por 2 motivos, la primera porque me encantó y la segunda para mejorar mi técnica de hacer los rollitos!!!
Ahora los tapamos con un paño y los dejamos levar hasta que doblen su volumen.


Como podéis observar han levado más del doble. 
Precalentamos el horno a 180ºC, yo puse un cacharrito con un poco de agua en el fondo del horno, ya que me dijeron que ayudaba mucho  a la hora de hornear panes,ya que aporta humedad y facilita mucho el desarrollo de la corteza, y vaya si ayuda!!!
Pincelamos nuestros panes con huevo batido y los metemos al horno unos 30 minutos con calor arriba y abajo, sin ventilador. La superficie se pondrá marroncita, pero si veis que se os tuestan mucho poner un papel de aluminio por encima. Pero ya os digo yo que al poner el cuenco de agua la diferencia de la corteza es abismal y a mí no me hizo falta cubrirlo y la corteza no quedó dura.
Sacamos del horno y dejamos unos minutos dentro del molde, luego desmoldamos y dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.
Es muy importante no dejarlos mucho rato en el molde, ya que si no el pan se humedece.



Receta adaptada de Con Aroma de Vainilla.