Muy buenas!!!!
Por aquí estoy de nuevo, ya os anticipo que debido a que las temperaturas ya lo permiten he encendido el horno y para inaugurar la temporadea os traigo ésta auténtica delicia.
Cuando probéis éstos deliciosos y suaves panecillos de patata espolvoreados con semillas, caerás rendida ante ellos, los puedes rellenar tanto de dulce como de salado y se conservan durante varios días perfectamente dentro de una bolsa cerrada.
Respecto a la receta simplemente necesitarás un poco de patata cocida ( yo apoveché unas pocas que me sobraron de la comida), bien triturada y sin grumos, el resto de los ingredientes también los tendrás a mano en tu despensa sin problema alguno.
El resultado serán unos panecillos con una miga de lo más suave y esponjosa.....bueno....no me enrollo más y voy con la receta!!!!
Ingredientes para 10 panecillos
* Para la masa
350 g de harina de fuerza
150 g de leche entera
1 yema
150 g de patata hervida, triturada y sin grumos
3 g de levadura seca de panadería
1 cucharadita de azúcar
10 g de sal
60 g de mantequilla a temperatura ambiente
* Para el acabado
Mezcla de semillas
yema y leche, mezclado en igual cantidad
Elaboración
En el bol de una batidora de pie ponemos todos los ingredientes excepto la mantequilla, equipada con un gancho amasador la batidora, comenzamos a amasar a velocidad baja para que los ingredientes se vayan integrando. Una vez tengamos los ingredientes anteriores integrados añadimos la mantequilla en trozos y continuamos amasando a velocidad media, amasamos hasta obtener una maasa suave, lisa y elástica.
Éste proceso de amasado nos puede llevar unos 10 minutos o más, ya que para conseguir éste aspecto en la masa debemos de amasarla hasta que el gluten se desarrolle. La masa será muy suave al tacto y nada pegajosa, llegado a éste punto la pasaremos a un bol que previamente habremos aceitado y la cubriremos con film transparente.
Llevamos el bol a un lugar cálido y alejado de corrientes de aire dónde dejaremos que la masa duplique su volumen. Yo suelo hacerlo en el interior del horno y le enciendo la luz al horno.
Una vez que la masa haya duplicado su volumen, simplemente la desgasificamos, dándole un ligero amasado, dejaremos reposar de nuevo la masa 10 minutos tapada con un paño de cocina. Luego dividimos en 10 porciones iguales y boleamos para formar cada panecillo. Los colocamos en 2 placas de horno cubiertas con papel de horno y dejando espacio entre ellos, volvemos a cubrir con una paño y los volvemos a dejar leudar hasta que doblen su volumen.
Cuando los panecillos estén listos precalentamos el horno a 180ºC y colocamos un cuenco resistente al calor con un poco de agua en el fondo del horno para generar vapor y así facilitar el desarollo de los panecillos durante el horneado. Mientras el horno se calienta pincelamos nuestros panecillos con la mezcla de yema de huevo y leche, espolvoreamos con la mezcla de semilas que deseemos y con aguda de un cochillo afilado haremos una cruz en la superficie de cada panecillo.
Abrimos la puerta del horno, retiramos el cuenco con agua del horno y llevamos los panecillos al horno durante unos 30 minutos, si vemos que se nos doran demasiado pasados 25 minutos los cubriremos con papel de aluminio.
Retiramos del horno y pasamos a una rejilla para que se enfríen por completo, una vez fríos se conservan durante unos días en un recipiente hermético.