Hola!!!
Vuelvo de nuevo y con un gran descubrimiento para endulzaros todas las celebraciones. Hoy vengo con una receta muy sencilla y resultona que os dará muchas alegrías, tanto a vosotros como a vuestros comensales.Y como no es de las recetas recetas que os gustarán ya que la podréis elaborar la noche anterior a la celebración y así al día siguiente disponer de tiempo para otros menesteres. Además la elaboración no es nada del otro mundo ya que tan sólo tendréis que hacer una especie de crema pastelera meterla al horno y listo!!!
Así que no me enrollo más y al lío!!!
Ingredientes
1 lámina de masa brisa
2 huevos más 1 yema tamaño L
500 ml de leche
95 gr de azúcar
60 gr de maicena
200 ml de nata
1 cucharada de esencia de vainilla
Elaboración
Comenzaremos batiendo ligeramente los huevos y la yema.
Separaremos una taza del total de la leche y diluimos en ella la maicena hasta que no haya ningún grumo.
En un bol ponemos el contenido de la taza de la leche y la maicena, le añadimos el azúcar, los huevos batidos y la vainilla. Volvemos a batir hasta que esté todo bien integrado.
Ponemos una cazuela al fuego con la leche restante y la nata. Cuando rompa a hervir, bajamos el fuego e incorporamos la mezcla del bol. Ahora cocinamos a fuego suave y removemos continuamente para evitar que se pegue y se formen grumos. La tendremos al fuego hasta que espese y tenga la textura de una crema pastelera. En este momento retiramos del fuego, cubrimos con un filma a piel ( el film debe de estar en contacto con la crema para evitar que se haga una costra).
Mientras tanto preparamos el molde.
Yo suelo utilizar un molde de 18 cm circular y desmontable para que luego me sea más fácil el desmoldado. Coloco la masa sobre el molde sin quitarle el papel de horno que esta trae, la voy colocando con cuidado y ajustándola al molde para evitar que se me rompa, retiramos los el exceso de masa en los bordes y recortamos también el exceso de papel de horno. Una vez la tengamos lista, con un tenedor la pinchamos en el fondo para evitar que crezca en el horno.
Ahora sólo nos queda verter la crema que ya estará templada sobre la masa que tenemos preparada en el molde.
Llevamos nuestro molde al horno que previamente habremos precalentado a 190ºC, y lo dejamos unos 60 minutos o hasta que la crema y la masa estén doradas, os recuerdo que cada horno es distinto. Os parecerá que le falta tiempo por que por el centro aún estará blando y tiemble, pero debéis tener en cuenta que el flan debe reposar para terminar de asentarse, así que lo retiraremos del horno y lo dejaremos enfriar a temperatura ambiente y luego lo llevaremos al frigorífico para que termine de asentarse, mínimo 4 horas, pero yo os recomiendo que la dejéis de un día para otro.
P.D. Yo la dejo reposar en el molde no la desmoldo hasta que ha reposado.
La hice para una comida familiar y cabe decir que triunfo, tanto que ya la pidieron para venideras. Se va a quedar en las fijas de las reuniones familiares junto con la tarta de queso al horno y el pan dulce de naranja.
Espero que os animéis a hacerla y ya nos contaréis el resultado!!!